Sin lugar a equivocarme, las últimas semanas han sido las más estresantes para nuestra generación.

Tendríamos que remontarnos a la época de la Segunda Guerra Mundial para recordar lo inquietante que fue pensar que en cualquier momento se iniciaba una guerra nuclear. Una pandemia es un evento en el cual, el enemigo no es una bomba, ni algún político, simplemente es un virus.
Pero, ¿Cómo nos defendemos de este enemigo?
Esta enfermedad necesita que tengamos un buen equipo para luchar, el arma correcta para soportar el embate, además de una buena alimentación y dormir lo suficiente, es contar con un respaldo financiero.

De este tiempo podemos sacar algunas lecciones sobre la importancia de estar asegurado:
No te pasas pensando en los gastos. Cuando no tienes seguro, y además tienes problemas financieros (muy normal hoy en día), te pasas pensando en los gastos que vendrán. Si tienes un seguro de salud, te olvidas de estos problemas, lo que te da paz para tomar decisiones sobre qué doctor escoger o en qué hospital tratarte.
Elige un asesor y no un vendedor. En el curso de un problema de salud, lo único que deseas es apoyar a tu familiar para que éste se recupere. Un buen asesor está contigo, las veces que sea necesario para que su cliente reciba el servicio y las atenciones que merece. Es como tener un abogado de la salud.
Puedes escoger otros países y profesionales. Esta es una oportunidad realmente interesante, algunos seguros te ofrecen la opción de escoger el país donde te puedes tratar, o pedir segundas opiniones sin costo y sin viajar. Lo mejor es que dado el nivel de competencia actual, los precios son bastante asequibles.
En definitiva, si tienes un seguro de salud, aseguras estos 3 ámbitos de la vida:
- Tu salud
- Tus finanzas; y
- Tu familia
Si estos ámbitos se encuentran asegurados, tu vida, en el momento exacto en que debes tomar decisiones fundamentales en corto tiempo, se vuelve más clara, y si además cuentas con el apoyo de un asesor que te guía y gestiona, puedes no solamente salvar la vida de alguien cercano, sino hacer que tus niveles de estrés sean manejables y tomes decisiones correctas.
Artículo publicado por Roberto Marcos, asesor de seguros. Puedes revisar su blog o contactarlo vía e-mail.