Ni lociones, ni shampoos, ni suplementos vitamínicos, ni frutas. El secreto para curar la calvicie podría estar en una sustancia química presente en las papas fritas de McDonald’s.
Un grupo de científicos japoneses de la Universidad Nacional de Yokohama utilizó dimetilpolisiloxano, la silicona que se le añade a las papas fritas de la cadena de comida rápida, para regenerar el cabello de ratones. Las pruebas preliminares indicaron que este método -probablemente- tendría el mismo éxito en las células de la piel humana.
En un artículo publicado en la revista Biomaterials, los científicos afirmaron que podían generar hasta cinco mil gérmenes de folículo piloso (HFG) simultáneamente. Esto se considera uno de los obstáculos más difíciles para la medicina regenerativa capilar.
En cosa de un par de días, los ratones que tenían estos folículos trasplantados en su espalda y cuero cabelludo comenzaron a generar nuevos pelos negros en estas áreas.
De acuerdo con Junji Fukuda, un profesor de la universidad que ayudó a escribir el estudio, el uso de la sustancia química fue crucial para producir con éxito los HFG. «Usamos dimetilpolisiloxano permeable al oxígeno en el fondo del vaso de cultivo, y funcionó muy bien», aseguró.
Además agregó que el método es «sólido y prometedor», y que esperan que esta técnica «mejore la terapia regenerativa del cabello humano para tratar la pérdida de pelo, como la alopecia androgénica».
Si bien el producto químico aparentemente fue útil para el experimento, no desencadena en sí mismo el crecimiento del cabello. Por lo tanto, es poco probable que comer papas fritas de McDonald’s termine con la calvicie.
vía T13.cl